"¿No tiene inspiración? ¿Su obra literaria se siente estancada? Diseñe su propio alterego aquí y descubra un nuevo mundo de respuestas, creadas por una personaje que se parece a usted, pero no tiene que acatar las leyes del país"
-Sacado de www.diseñesualterego.com
lunes, 14 de septiembre de 2009
sábado, 12 de septiembre de 2009
From Alejandra's closet
Suppose I understand everything. Suppose I meant to be so free, nothing could really bother me. Suppose I learned form everyone cause I wanted and used them cause I loved to think I knew how. Suppose all my dreams, even the darkest and most secret ones became truth even before I could handle them. Suppose I used myself as an object so much I started to think in myself as an object. Suppose I stopped remembering who I was before, I erased myself and changed my face and memory. Suppose I can see behind your skin, reshape myself to your real form and show you who you are. Suppose I was born to make you happy and to make you find yourself. Suppose I want to sacrifice myself to help you find what you want. Suppose my life can just stop being meaningless by giving myself to people I'm never sure I'm gonna get what I give. Suppose I already know how is this gonna end and don't care. Suppose I'm here anyway.
It's that desease of the age
It's that desease that we crave
Alone at the end of the race
We catch the last bus home
Corporate america wakes
Coffee republic in case
We open the latch on the gate
Of the hole that we call our home
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Maybe we're victims of fate
Remember when we'd celebrate
We'd drink and get high until late
And now were all alone
Wedding bells aint gonna chime
With both of us guilty of crime
And both of us sentenced to time
And now were all alone
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me
It's that desease of the age
It's that desease that we crave
Alone at the end of the race
We catch the last bus home
Corporate america wakes
Coffee republic in case
We open the latch on the gate
Of the hole that we call our home
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Maybe we're victims of fate
Remember when we'd celebrate
We'd drink and get high until late
And now were all alone
Wedding bells aint gonna chime
With both of us guilty of crime
And both of us sentenced to time
And now were all alone
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me
domingo, 6 de septiembre de 2009
Back to childhood
Pensé que volver al lugar donde pasé los mejores momentos de mi infancia me dejaría un mal sabor de boca. No sabía qué tan equivocada estaba...
Aunque es cierto que mi realidad actual no tiene nada que ver con la niña bien portada que solía vivir toda clase de aventuras en el club, también es cierto que revivir los momentos en los que mi inocencia no me permitía darme cuenta de "la realidad" me dejó un dulce sabor de boca y reavivó mi esperanza, al tiempo que reafirmó la mujer que soy.
Es cierto que mi búsqueda de identidad me ha llevado por extraños y absurdos caminos, hasta el otro lado del continente y de vuelta a mi alma mater, pasando por inhóspitas incursiones en la vida familiar y la incansable e ingrata persecusión de una figura paterna que nunca es satisfactoria, sin embargo poco me he dado cuenta en este largo viaje de que la persona que soy, mi propia identidad se encuentra en las personas que están a mi lado y que han permanecido con los años conmigo, en las personas con las que me formé y crecí, en mi familia y los amigos que me han enseñado a sentir, a creer y a vivir, más a allá de sus errores y nuestras diferencias.
Parece que empiezo a encontrar a la persona que creía perdida y que sin saberlo, me gritaba desde todas partes: "Aquí estoy, donde siempre he estado".
Aunque es cierto que mi realidad actual no tiene nada que ver con la niña bien portada que solía vivir toda clase de aventuras en el club, también es cierto que revivir los momentos en los que mi inocencia no me permitía darme cuenta de "la realidad" me dejó un dulce sabor de boca y reavivó mi esperanza, al tiempo que reafirmó la mujer que soy.
Es cierto que mi búsqueda de identidad me ha llevado por extraños y absurdos caminos, hasta el otro lado del continente y de vuelta a mi alma mater, pasando por inhóspitas incursiones en la vida familiar y la incansable e ingrata persecusión de una figura paterna que nunca es satisfactoria, sin embargo poco me he dado cuenta en este largo viaje de que la persona que soy, mi propia identidad se encuentra en las personas que están a mi lado y que han permanecido con los años conmigo, en las personas con las que me formé y crecí, en mi familia y los amigos que me han enseñado a sentir, a creer y a vivir, más a allá de sus errores y nuestras diferencias.
Parece que empiezo a encontrar a la persona que creía perdida y que sin saberlo, me gritaba desde todas partes: "Aquí estoy, donde siempre he estado".
jueves, 3 de septiembre de 2009
En el mar de Valpo
Sigo pareciendo la niña más triste de la ciudad, aunque ahora la ciudad es más grande. Me encuentro perdida en recuerdos de lugares que creí míos por haber poseído un instante. Parece que me sumergí en el mismo mar de Valparaíso que alguna vez me acogió dejándome soñar con su brillo y luego me arrojó contra sus rocas hediondas, demostrándome que después de todo lo valiente que puedo ser, está una niña que busca que su papá la proteja de este horrible mundo.
Silencio. No hay protección ni consuelo, sólo mi ciudad que me grita que no es más mía, que me dice cada día que ya no importa a dónde vaya, ni cuánto crea que conozco el lugar, ya no pertenezco a el.
Silencio. No hay protección ni consuelo, sólo mi ciudad que me grita que no es más mía, que me dice cada día que ya no importa a dónde vaya, ni cuánto crea que conozco el lugar, ya no pertenezco a el.
lunes, 15 de junio de 2009
miércoles, 3 de junio de 2009
viernes, 29 de mayo de 2009
viernes, 24 de abril de 2009
La ex extraña historia de mi ex maldición lanzada por un Star Wars geek
Cuando de niña veía escenas de Star Wars en Canal 5 supe que era parte de la programación rutinaria de cualquier canal, así que no la vi, ni una de ellas, pensé que siempre estaría ahí. De adolescente me encontré con un montón de esos Star Wars geeks que le platican a todo el mundo la historia y su muy personal explicación a la mitología interna y la relación con los personajes; ya saben, unos querían ser Yoda y ser mentores de todos, o también estaban los más nerds que amaban a R2-D2 y juraban que entendían lo que dice con sus ruiditos de robot setentero. Oí tanto hablar de ella que de alguna manera supuse que entendía de lo que se trataba y que no era necesario verla. Hace algunos años, cuando encontré mi pasión por el cine (y digo encontré porque sé que siempre estuvo ahí) decidí que ya que era una película clásica, que una gran cantidad de capitales simbólicos de la cultura pop habían sido extraídos de Star Wars, debía verla. Ahí fue donde la maldición de todos aquellos geeks (o de alguno en particular) comenzó a surtir efecto: cada vez que me disponía a verla, alguien llamaba por teléfono con una emergencia que me hacía salir corriendo, la película estaba misteriosamente rayada o la habían prestado sin acordarse. Incluso traté de bajarla sin éxito un par de veces. Tampoco diré que traté de verla con todas mis fuerzas, pero siempre hubo una excusa para no hacerlo. Hoy, a mis 26 años, 2 meses y 7 días, veré por primera vez de qué se trata todo esto. Un Star Wars geek, de esos que tanto odié en mi adolescencia ha decidido terminar con mi maldición y prestarme su edición especial. Desde aquí, gracias...
domingo, 22 de marzo de 2009
Lyotard
Es cierto, me enamoré como una niña...
Cada una de sus palabras penetran en mi psique como si el amor de mi vida me hablara y lo creo todo, creo que porque explica con increíble soltura lo que he pensado desde siempre: que esta cultura se deconstruye. Baudrillard me lo había dicho antes, aunque lo escribió después, sin embargo Baudrillard no es un lingüista. Eso lo cambia todo. Aunque simpre me resultó cierta la idea de la desconstrucción por los medios y el lenguaje, nunca pude verlo con tal claridad...
Simplemente lo amo...
Cada una de sus palabras penetran en mi psique como si el amor de mi vida me hablara y lo creo todo, creo que porque explica con increíble soltura lo que he pensado desde siempre: que esta cultura se deconstruye. Baudrillard me lo había dicho antes, aunque lo escribió después, sin embargo Baudrillard no es un lingüista. Eso lo cambia todo. Aunque simpre me resultó cierta la idea de la desconstrucción por los medios y el lenguaje, nunca pude verlo con tal claridad...
Simplemente lo amo...
sábado, 14 de marzo de 2009
La muerte se refleja en la ventana, sonriendo
Sentí que la cabeza me estallaba. El rebote de sentimientos me dejó nublada por un instante. Ya no era yo.
Quise dejar mi cuerpo. Evaporarme por un rato. Dejar de sentir el dolor que latía en mi corazón, evaporarme con el humo del cigarro que me estaba fumando. Extrañaba mi yo antes de esto. Antes de todo. La que creía en las patrañas machistas como la niña que era. La que se sentía una mujer. La que soñaba fantasías envueltas en nubes rosas. La que no sabí de los males de la vida. Entonces mi corazón estaba desnudo contemplando la realidad con timidez e ilusión.
La niña contempló mi corazón lleno de miedos y barreras y quiso curarlo. Yo la contemplé con aplomo "Lo siento nena" no pude decir más, las lágrimas rodaron por mis mejillas. <> pensé y ví mi vida pasar frente a mis ojos. Una fumada más.
Cuando reaccioné Alejandra estaba al mando. Se empeñó en comprarme nuevos ojos para no sentir, un nuevo cuerpo y una nueva cara para sólo pensar. Se empeñó en construir una casa de cristal blindado para ver el mundo y protegernos de los zombies mutantes. Compró también una escopeta, se sentó en el sillón vino y me dijo: "No es qué quisiera haber nacido, pero si no lo hubiera hecho, estarías muerta. Agarra tus pedazos y levántate."
Y me levanté.
Quise dejar mi cuerpo. Evaporarme por un rato. Dejar de sentir el dolor que latía en mi corazón, evaporarme con el humo del cigarro que me estaba fumando. Extrañaba mi yo antes de esto. Antes de todo. La que creía en las patrañas machistas como la niña que era. La que se sentía una mujer. La que soñaba fantasías envueltas en nubes rosas. La que no sabí de los males de la vida. Entonces mi corazón estaba desnudo contemplando la realidad con timidez e ilusión.
La niña contempló mi corazón lleno de miedos y barreras y quiso curarlo. Yo la contemplé con aplomo "Lo siento nena" no pude decir más, las lágrimas rodaron por mis mejillas. <
Cuando reaccioné Alejandra estaba al mando. Se empeñó en comprarme nuevos ojos para no sentir, un nuevo cuerpo y una nueva cara para sólo pensar. Se empeñó en construir una casa de cristal blindado para ver el mundo y protegernos de los zombies mutantes. Compró también una escopeta, se sentó en el sillón vino y me dijo: "No es qué quisiera haber nacido, pero si no lo hubiera hecho, estarías muerta. Agarra tus pedazos y levántate."
Y me levanté.
sábado, 31 de enero de 2009
Anoche sentí como replicaba dentro de mí. Creo que ese latir de mi corazón hizo que la casa comenzara a temblar también. Las paredes comenzaron a perder sus cimientos. Se elevaban por encima de mi cabeza pedazos de ladrillo. Un trozo de tirol planchado me devolvió a la realidad... ¿esto estaba pasando?
Con una mezcla de emociones vi el baño aparecer frente a mis ojos, me tapé los oídos. Las lágrimas en mis ojos no me dejaban ver cómo se rompía el huevo. El cascarón de mi casa flotaba ahora arriba de mi. Sentí un dolor enorme de cabeza que no me dejó pensar... Me desamayé.
Con una mezcla de emociones vi el baño aparecer frente a mis ojos, me tapé los oídos. Las lágrimas en mis ojos no me dejaban ver cómo se rompía el huevo. El cascarón de mi casa flotaba ahora arriba de mi. Sentí un dolor enorme de cabeza que no me dejó pensar... Me desamayé.
sábado, 24 de enero de 2009
The dark room
"Since the world drives to a delirious state of things, we must drive to a delirious point of view" Baudrillard
Releyendo la continuidad de la falta de esperanza y la inmediatez del vacío, me encontré pensandome atada, entre una estudiante universitaria y el futuro desempleo que, al menos parece ser más prometedor...
Encontré de nuevo esa puerta y me hayo frente a ella entre asustada y terriblemente emocionada, la oscuridad me llama de nuevo a revisar sus penumbras, a encontrar lo que quedó...
Petrificada en este umbral contemplo como una niña que sabe lo que puede encontrar al cruzar por él... Vacío. -Sabía que no te importaba realmente nada, pero ¿esto?- argumentó Cecilia desde su pedestal de "culta universitaria"
El vacío rugía desde el negro de la habitación. Ya me llamaba.
Releyendo la continuidad de la falta de esperanza y la inmediatez del vacío, me encontré pensandome atada, entre una estudiante universitaria y el futuro desempleo que, al menos parece ser más prometedor...
Encontré de nuevo esa puerta y me hayo frente a ella entre asustada y terriblemente emocionada, la oscuridad me llama de nuevo a revisar sus penumbras, a encontrar lo que quedó...
Petrificada en este umbral contemplo como una niña que sabe lo que puede encontrar al cruzar por él... Vacío. -Sabía que no te importaba realmente nada, pero ¿esto?- argumentó Cecilia desde su pedestal de "culta universitaria"
El vacío rugía desde el negro de la habitación. Ya me llamaba.
domingo, 18 de enero de 2009
Ces' back
Supongo que tardé un millón de años en volver a hablar conmigo misma. Podría decir que las presiones del matrimonio y la estresante vida de estudiante no me lo permitieron, pero estaría mintiendo; la verdad no podía ni quería saber nada de mi.
Y es sólo ahora cuando me siento a reflexionar frente a mi pantalla con un cigarro en la boca sobre lo que me he convertido... Y me gusta.
Por estúpido que parezca recuperé la inocencia de los 18 que vino a mi como redención de toda mi maldad y soberbia. Me encuentro de pronto sin saber la verdad ni querer saberla, disfrutando las cosas que hago porque sé que me dirigen a un lugar específico, aunque no sé cuál es ese lugar.
En camino que me trazo día a día escribiré esto, a modo de vertedero de emociones e ideas, sólo para celebrar que regresé...
Y es sólo ahora cuando me siento a reflexionar frente a mi pantalla con un cigarro en la boca sobre lo que me he convertido... Y me gusta.
Por estúpido que parezca recuperé la inocencia de los 18 que vino a mi como redención de toda mi maldad y soberbia. Me encuentro de pronto sin saber la verdad ni querer saberla, disfrutando las cosas que hago porque sé que me dirigen a un lugar específico, aunque no sé cuál es ese lugar.
En camino que me trazo día a día escribiré esto, a modo de vertedero de emociones e ideas, sólo para celebrar que regresé...
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