Alter Egos a la Medida

"¿No tiene inspiración? ¿Su obra literaria se siente estancada? Diseñe su propio alterego aquí y descubra un nuevo mundo de respuestas, creadas por una personaje que se parece a usted, pero no tiene que acatar las leyes del país"

-Sacado de www.diseñesualterego.com

From Alejandra's closet

Suppose I understand everything. Suppose I meant to be so free, nothing could really bother me. Suppose I learned form everyone cause I wanted and used them cause I loved to think I knew how. Suppose all my dreams, even the darkest and most secret ones became truth even before I could handle them. Suppose I used myself as an object so much I started to think in myself as an object. Suppose I stopped remembering who I was before, I erased myself and changed my face and memory. Suppose I can see behind your skin, reshape myself to your real form and show you who you are. Suppose I was born to make you happy and to make you find yourself. Suppose I want to sacrifice myself to help you find what you want. Suppose my life can just stop being meaningless by giving myself to people I'm never sure I'm gonna get what I give. Suppose I already know how is this gonna end and don't care. Suppose I'm here anyway.

It's that desease of the age
It's that desease that we crave
Alone at the end of the race
We catch the last bus home

Corporate america wakes
Coffee republic in case
We open the latch on the gate
Of the hole that we call our home

Protect me from what I want...
Protect me protect me

Maybe we're victims of fate
Remember when we'd celebrate
We'd drink and get high until late
And now were all alone

Wedding bells aint gonna chime
With both of us guilty of crime
And both of us sentenced to time
And now were all alone

Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me

Protect me from what I want...
Protect me protect me
Protect me from what I want...
Protect me protect me

Back to childhood

Pensé que volver al lugar donde pasé los mejores momentos de mi infancia me dejaría un mal sabor de boca. No sabía qué tan equivocada estaba...

Aunque es cierto que mi realidad actual no tiene nada que ver con la niña bien portada que solía vivir toda clase de aventuras en el club, también es cierto que revivir los momentos en los que mi inocencia no me permitía darme cuenta de "la realidad" me dejó un dulce sabor de boca y reavivó mi esperanza, al tiempo que reafirmó la mujer que soy.

Es cierto que mi búsqueda de identidad me ha llevado por extraños y absurdos caminos, hasta el otro lado del continente y de vuelta a mi alma mater, pasando por inhóspitas incursiones en la vida familiar y la incansable e ingrata persecusión de una figura paterna que nunca es satisfactoria, sin embargo poco me he dado cuenta en este largo viaje de que la persona que soy, mi propia identidad se encuentra en las personas que están a mi lado y que han permanecido con los años conmigo, en las personas con las que me formé y crecí, en mi familia y los amigos que me han enseñado a sentir, a creer y a vivir, más a allá de sus errores y nuestras diferencias.

Parece que empiezo a encontrar a la persona que creía perdida y que sin saberlo, me gritaba desde todas partes: "Aquí estoy, donde siempre he estado".

En el mar de Valpo

Sigo pareciendo la niña más triste de la ciudad, aunque ahora la ciudad es más grande. Me encuentro perdida en recuerdos de lugares que creí míos por haber poseído un instante. Parece que me sumergí en el mismo mar de Valparaíso que alguna vez me acogió dejándome soñar con su brillo y luego me arrojó contra sus rocas hediondas, demostrándome que después de todo lo valiente que puedo ser, está una niña que busca que su papá la proteja de este horrible mundo.

Silencio. No hay protección ni consuelo, sólo mi ciudad que me grita que no es más mía, que me dice cada día que ya no importa a dónde vaya, ni cuánto crea que conozco el lugar, ya no pertenezco a el.